Kim S, Chul Cho M, Yong Cho S, Chung H, Raj Rajasekaran M.
Novel Emerging therapies for erectile dysfunction. Review Article. Male Sexual Health and Dysfunction. https://doi.org/10.5534/wjmh.200007
Publicado online: 16 Marzo 2020
En este interesante y reciente artículo que os comento, se hace una completa revisión y actualización de los tratamientos para la disfunción eréctil masculina que están actualmente en vigencia en base a las Guías Clínicas más actualizadas. Así mismo, Podemos introducirnos en las actuales y futuras prometedoras líneas de investigación en nuevos tratamientos.
Aunque actualmente disponemos de unos tratamientos estandarizados de referencia: inhibidores de fosfodiesterasa tipo 5 (sildenafilo, tadalafilo, vardenafilo, avanafilo), inyección intracavernosa de agentes vasoactivos, los dispositivos de vacío, las prótesis de pene, el porcentaje de pacientes que aún no responden a esta formas de tratamiento resulta relativamente alto. En este contexto, se están desarrollando unas prometedoras e innovadoras líneas de investigación terapéutica para la disfunción eréctil en los últimos 10 años. De acuerdo a recientes ensayos clínicos y pre-clínicos, agentes farmacológicos como los agonistas de los receptores centrales de la melanocortina o los nuevos agentes farmacológicos de acción periférica, incluyendo el activador de canales de potasio, los activadores de acción de la enzima guanilato ciclasa y los agentes farmacológicos donadores de óxido nítrico pueden resultar en mejorías significativas de la respuesta eréctil en pacientes no respondedores a otras terapias. También la combinación de estas nuevas formas de tratamiento con medicamentos existentes (como los propios inhibidores de la fosfodiesterasa tipo 5) puede resultar realmente eficaz en el tratamiento de las subpoblaciones de pacientes complejas de tratar, como los no-respondedores a tratamientos estándar. También ensayos clínicos randomizados muy recientes han mostrado resultados prometedores en la terapia regenerativa mediante la utilización de células madre en candidatos dificultosos a responder a tratamientos, como los pacientes con disfunción eréctil por diabetes o tras prostatectomía radical. La utilización de formas físicas de tratamiento, como la terapia de ondas de choque de baja intensidad (LI-SWT), usada en monoterapia o combinada con otros tratamientos como las propias células madre puede producir efectos beneficiosos en pacientes con disfunción eréctil de causa vasculogénica.
Vemos, por tanto, evidencia progresiva, científica, basada en ensayos clínicos randomizados que evalúan la eficacia de estas nuevas formas de tratamiento. Es cierto que algunas de estas opciones, y las que vayan apareciendo en el futuro necesitarán ser validadas en nuevos ensayos clínicos. Son buenas noticias: el compromiso de la ciencia y de la metodología de investigación para proporcionar a los pacientes con disfunción eréctil compleja diversas formas de tratamiento. Y ya no solamente tratamientos que mejoren el síntoma puro de la falta de erección, sino que sean capaces de curar la causa del problema.
Leamos por tanto, con optimismo estos textos.
